Necesitados. Con esa palabra se podía resumir como llegaban Independiente (M) y Los Andes al encuentro en el Malvinas. La Lepra, candidato por las incorporaciones de renom
bre, no sumaba ninguna victoria. Y la solución para salir del pozo no estuvo en sus estrellas, sino en Martín Gómez, uno de la casa. El inicio había mostrado a un conjunto local que quería adueñarse del control de la pelota. Pero con el correr de los minutos, Los Andes se fue acomodando en el terreno de juego. Parado de contra, la visita comenzó a generarle más de un dolor de cabeza a Guzmán, con un Juan Martín como principal arma de ataque. El 9 tuvo dos cabezazos, uno terminó en gol y fue anulado, y el otro se estrelló en el travesaño y terminó en manos del 1. Los de Trotta tenían a un Ariel Ortega mucho más activo que en los partidos anteriores, aunque no estaba fino en sus pases ni en los remates. Los mendocinos no eran precisos en los metros finales y las ideas se les acababan ni bien pisaban el área rival.El complemento comenzó mucho más entretenido que el PT. Los de Della Picca lo tuvieron en dos ocasiones: Martín disparó y tapó el arquero local. El rebote lo tomó Acosta Cabrera, pero su remate fue despejado sobre la línea por Brusco. Independiente comenzó a dominar territorialmente y generó varias situaciones para marcar, con un Martín Gómez quien explotó su velocidad. Los Andes volvió a dedicarse a jugar de contra. La Lepra se fue desesperando en búsqueda del triunfo. Y de tanto ir, Independiente tuvo su premio: Gómez, el mejor de la noche, estampó el tanto del triunfo luego de una maniobra de Roth. Los mendocinos sumaron su primera alegría, mientras que la visita acumuló la cuarta derrota al hilo y se hunde todavía más.
bre, no sumaba ninguna victoria. Y la solución para salir del pozo no estuvo en sus estrellas, sino en Martín Gómez, uno de la casa. El inicio había mostrado a un conjunto local que quería adueñarse del control de la pelota. Pero con el correr de los minutos, Los Andes se fue acomodando en el terreno de juego. Parado de contra, la visita comenzó a generarle más de un dolor de cabeza a Guzmán, con un Juan Martín como principal arma de ataque. El 9 tuvo dos cabezazos, uno terminó en gol y fue anulado, y el otro se estrelló en el travesaño y terminó en manos del 1. Los de Trotta tenían a un Ariel Ortega mucho más activo que en los partidos anteriores, aunque no estaba fino en sus pases ni en los remates. Los mendocinos no eran precisos en los metros finales y las ideas se les acababan ni bien pisaban el área rival.El complemento comenzó mucho más entretenido que el PT. Los de Della Picca lo tuvieron en dos ocasiones: Martín disparó y tapó el arquero local. El rebote lo tomó Acosta Cabrera, pero su remate fue despejado sobre la línea por Brusco. Independiente comenzó a dominar territorialmente y generó varias situaciones para marcar, con un Martín Gómez quien explotó su velocidad. Los Andes volvió a dedicarse a jugar de contra. La Lepra se fue desesperando en búsqueda del triunfo. Y de tanto ir, Independiente tuvo su premio: Gómez, el mejor de la noche, estampó el tanto del triunfo luego de una maniobra de Roth. Los mendocinos sumaron su primera alegría, mientras que la visita acumuló la cuarta derrota al hilo y se hunde todavía más.(Diario Olé)
