lunes, 18 de agosto de 2008

"Voy a dar mucho más"

En su debut en Independiente (M), el Burrito sabe que no brilló, pero clavó un penal de luxe para el 3-3 ante Defensa.
"Y acá están las porristas, dándole belleza erótica a esta fiesta del fútbol. El reconocimiento para estas pibas, en esta tarde en que toda la prensa está pendiente de lo que ocurre en Mendoza", arengaba Juan Carlos Videla, animador con voz y tono idéntico al Pedemonti del genial Todo por 2 pesos. Y apenas se iban las porristas aparecía un grupo de gimnasia, y luego chicos de Inferiores para formar el escudo de Independiente en el círculo central, símil Mundial 78. Las 15.000 personas que asomaban su expectativa por ver a la incorporación más importante que haya tenido el club y el Ascenso, disfrutaban de la fiesta previa, pero no disfrutaron la fiesta redonda. Porque Ariel Ortega, el que hoy aparece en las banderas con la inscripción "gracias Burrito" que se venden en la cancha, no fue, ni por la tapas, el que hace unos meses le daba otro título a River. Y no lo fue -dato no menor- en una categoría que se supone inferior. Ayer, en su debut con La Lepra, resultó uno del montón. Y él también así lo entendió: "Voy a dar mucho más", sentenció ya en la conferencia de prensa posterior al empate ante Defensa que él mismo impuso, con un gol de penal de ésos que generan la discusión de si un shot desde los 12 pasos ejecutado tan soberbiamente puede ser considerado golazo.Ortega jugó un PT para llevarse 3 ó 4 puntos de calificación. Independiente (M) parecía ya haberse acostumbrado a no depender de lo que habitara en la galera del Burrito, de ese meneo de cintura, de su gambeta más pura, todos ases tan vigentes como ayer ausentes. Nunca tuvo el joystick del equipo el ídolo de Núñez al que hoy le canta Orteeega, Orteeeega gran parte de Mendoza. Se notó la falta de feeling entre él y sus compañeros. Y eso, Ariel así lo entendió. "Nos falta conocernos con el grupo", dijo, lógico, quien sin embargo enseguida se encargó de aclarar que se sintió "ansioso pero cómodo por ser el primer partido". Y a la vez mostró los dientes con "esa pregunta es de mala leche, yo ahora estoy en Independiente", cuando Olé le consultó -sin doble sentido- acerca de si había interiorizado del score entre su ex River y Central. No encontró el Burrito "ninguna diferencia" con la elite de nuestro balompié ni, exageró, otras latitudes. "El fútbol es igual en todos lados. Acá, en Primera, en Europa. En todos lados hay buenos y mediocres jugadores", ilustró quien amenazó a la cueva de Defensa en efímeros flashes del ST, y sobre todo apenas estampado el 3-3. Aunque sólo en una ocasión estuvo ahí de engendrar una de remake de sus tantas. Fue a 10' del último pitazo, cuando tomó un rebote y se mandó, soñador, al área para terminar pateando de zurda, arriba y lejos, como aquél tiro libre del inicio, ambos -junto al penal- sus tiros a puerta. No fue su debut soñado en esta quimera vívida de La Lepra, club que mientras se afina el Burrito triplica sus socios. Una tendencia que se mantendrá y hasta aumentará si el del dorsal 10 cumple su promesa de obsequiar ese plus de los de pulserita VIP.
(Diario Olé)

No hay comentarios: