domingo, 28 de septiembre de 2008

Independiente empató ante Chacarita

El Azul del parque igualó sin goles ante Chacarita, en el estadio de Ferrocarril Oeste. El conjunto dirigido por la dupla Bolado – Carbini, evidenció una mejoría en su juego y supo manejar los hilos de un encuentro parejo.
Cuando se toca fondo sólo resta subir. Aguardar un ascenso paulatino, que te saque del letargo mortal en el que estás inmerso. Y poder respirar. Respirar para construir de nuevo. Edificar una ilusión de sueños, que se materialicen semana a semana, con el grito estruendoso de una victoria. Y otra, y otra…Eso desea Independiente. Tomar los pedazos de un deseo popular y volver a construir su castillo de esperanzas, que furtivamente le derrumbaron golpe a golpe. Y hoy puso su primera piedra. Bolado acomodó nuevamente las piezas y le dio una chance a aquellos que llegaron como titulares. De la Vega ocupó la banda derecha de la defensa, Seltzer la de la izquierda, Barsottini se paró junto a Brusco y Buján se ubicó en la zona de transición. Y en la casa del puntero ninguno defraudó. El dominio de pelota que mostró el Azul del parque, fue propio de un conjunto con pretensiones, robándose el protagonismo en Caballito y alborotando corazones de un puntero sin ideas.Así Gómez inquietaba por su sector. Junto con Ortega y Buján llevaron peligro permanente al área defendía por Tauber. Brusco se lo perdió de cabeza y Barsottini después. La visita era más pero se quedaba sin combustible al momento de concretar.Y Chacarita resurgió. Quiso sacar a relucir sus pergaminos y los usó para cabecear. Aróstegui en el área chica le dio de pique al suelo y la bocha golpeó el travesaño. Y en segunda oportunidad nuevamente Aróstegui, sacó un frentazo potente que se desvió en el larguero, ante la mirada inútil de Guzmán. El complemento nos mostraría exactamente lo mismo. Nuevamente Independiente se paró en campo rival y copó la mitad del terreno. Solís y Coudanes cortaban todo lo que intentaba transitar y Guzmán fue un mero espectador. Pero la tibieza ofensiva, siguió atentando contra la voluntad Leprosa. Hasta los cinco minutos finales, cuando luego de un legitimo gol Azul, no convalidado por el arbitro Pablo Díaz, Chacarita metió en un arco a la visita a fuerza de centros y balones cruzados. Poco para el líder del torneo. El pitazo final decretó la igualdad y fue quizás el punto de partida, de un conjunto que pretende empezar a despegar. Se colocó la primera piedra. Resta seguir subiendo.

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